UN HOMBRE MAMÁ: Carlos Castro es la madre de María Clara y Tomás

E

n este mes de mayo, las mamás son protagonistas, ya sea porque es una fecha creada por el consumo o porque necesitamos fechas especiales para celebrar y agradecer, lo cierto es que en Fashion Radicals queremos hablar de los roles maternos que se salen un poco de los estereotipos, pero que al final son mamás. Este es el primer #PersonajeRadicals de cinco #MamasRadicals, se trata de Carlos Castro, un ingeniero de sistema, gerente general de Muma, una empresa de mobiliario, segundo de tres hermanos, tío de Candelaria, esposo de Carolina y mamá de María Clara y Tomás.

 

Fotografía @Lafandi

Ilustración: @nataliaminds

“Soy un hombre al que le gusta leer, pasar tiempo con los amigos y la familia, viajar, disfrutar del tiempo libre con Carolina, mi actual esposa, y jugar golf.” Así se describe Carlos, un hombre responsable, comprometido y leal a quien la vida lo invitó a ser Mamá de María Clara y Tomás. Su primera esposa, Claudia, falleció hace 12 años y medio en una situación no prevista, la intoxicación con un antibiótico le provocó una falla hepática y hubo necesidad de realizarle un trasplante de hígado, pero cuando salió de la operación falleció en cuidados intensivos, “en ese momento asumí el reto de ser mamá.” Nos confiesa.

Para Carlos el principal reto fue enfrentarse a las responsabilidades que hacía su esposa: “cuando hay un papá y una mamá los deberes se distribuyen y la verdad vivimos en una sociedad machista donde el hombre desempeña unos roles de trabajo fuera del hogar, mientras que la mujer está en la casa con los hijos, pero cuando Claudia ya no estuvo, asumí, no solo mi trabajo, sino también estar en la casa con mis hijos y solventar esos roles del hogar como cocinar, estar pendiente del colegio, que fueran bien vestidos, de la lonchera, su educación cotidiana, etc. Debo confesar que me costó mucho adecuarme a ese rol de madre y desempeñarme bien como mamá, la verdad valoro mucho a las mujeres y su trabajo en el hogar, sé que muchos hombres no recostamos en ellas y no hacemos nada con la disculpa del trabajo.”

Hoy ser mamá de María Clara y Tomás es algo natural en Carlos y aunque en un inicio hubo muchas dificultades, pues la niña tenía 8 años y el niño 4, admite que desde el inicio sus hijos fueron responsables de muchas cosas de su vida. “El día a día en ese momento era levantarme temprano a preparar desayunos, estar pendiente que llevaron todo para el colegio y salir a trabajar, y en la tarde llegar a casa hacer cosas del hogar, en un principio decidí no tener ayuda de nadie, pero posteriormente me di cuenta que era hacerme la vida más difícil, entonces como a las 6 meses conseguí una empleada que me ayudara…”

Como a toda mamá que trabajaba a Carlos le tocó solventar y estar pendiente de muchas cosas de manera remota, desde llamadas de sus hijos para pedir permiso para ir a la casa de algún amigo hasta la petición de una plastilina para la tarea del colegio. “Me tocó vivir muchas cosas como el crecimiento de María Clara de niña a mujer, situaciones de clases de natación y de inglés, cosas que seguramente yo no habría tenido que vivir si Claudia estuviera viva, pero al final son anécdotas muy parecidas a las que te contaría cualquier mamá.”

Muchas veces se sintió impedido para afrontar ciertas emociones y situaciones, por lo que le tocó pedir ayuda a las mujeres de la familia, su hermana, su cuñada y su actual esposa fueron las mujeres que le guiaron en su rol materno, pero en su experiencia ser mamá fue algo muy orgánico que nació de un momento desafortunado, pero que al final como él mismo lo confiesa no hay diferencia de género para ser madre, “yo creo que depende de cada persona y de su personalidad, no creo que las mujeres tengan más ventajas sobre un hombre para ser mamá, depende de las personalidades y del contexto como fuiste criado y la forma cómo tomas las decisiones racionales o emocionales y al final todos tenemos la preparación necesaria para ser buenos padres. Sin embargo encontrar tu lado sentimental cuando eres racional y práctico como yo, no es fácil, aunque eso de ser práctico me permitió hacer ciertas cosas bien, muchas veces necesité estar conectado desde lo emocional con ellos.”

Y es que una madre difiere de ser papá en la intimidad que las mujeres tiene con los hijos, tal vez desde que están en el vientre, y aunque hay papás que logran conectarse, por lo general las madres están más enlazadas y se acercan más a los detalles de la vida de los hijos (as). “Yo tuve esa posibilidad” afirma Carlos.

Dormir juntos todos en una sola cama, peinar a María Clara sin jalarle el pelo, hacer monerías para levantar a Tomás todas las mañana, enseñarles respeto y disciplina, llorar juntos, aunque al él no le hubieran enseñado a llorar, perdonarse y demostrarles afecto y cariño como lo hacen las mujeres con sus hijos(as) y consolidar la idea que son ellos tres por encima de todo, fueron y son cosas que Carlos vive y construye con su hija e hijo: “Ellos ha sido mi motor… Y recuerdo cuando estaban pequeños y salíamos a caminar a un centro comercial, por ejemplo, y los tomaba de la mano, cada uno a un lado, la gente me decía: tan lindo el papá sosteniendo a sus dos hijos, pero yo siempre sentí que era al contrario, eran ellos los que me sostenían a mi…”

Para vivir solo necesitas… paciencia y aprender a quererse a uno mismo

Un Defecto: perfeccionista

Tu ocupación favorita: ser jefe y líder

El estado actual de tu espíritu: feliz

Un Lema: todo lo que a uno le pasa en la vida es lo mejor que le puede pasar.