PARALELO 2015: un nuevo circuito cultural

“U

na feria que en la conexión de sitios emblemáticos y de distintas actividades, crea un mapa, una ruta invisible que abarca de manera paralela, distintas caras del arte”, así se define Paralelo, un nuevo proyecto cultural de ciudad (Medellín), creado por el colectivo Breakfast Club y que se estrena con la premisa de unir la música y las artes plásticas en un circuito que aunque no se unen en un mismo espacio, sí comparten una idea fija: la de propiciar durante 4 días, un festival donde artistas, desde músicos a pintores y dibujantes, tengan un espacio especial para presentar sus propuestas y visiones del mundo.

Así nace Paralelo, en sus dos circuitos alternos: el musical que en 5 estaciones, entre bares y discotecas, presentarán 9 artistas internacionales y 30 nacionales, todos en un calendario musical, pensado como un ambicioso festival, nunca visto en Medellín. Su circuito hermano, el de Artes Plásticas, llega precisamente en un momento próspero para las galerías y los museos de arte nacionales, donde las apuestas no solo se centran en el fortalecimiento de sus arquitectura, sino también en la maravillosa búsqueda de talentos emergentes que aporten más matices a a una historia que se sigue escribiendo.

Es precisamente en el concepto del arte emergente, que Paralelo, propone un espacio para el conocimiento y la adquisición de obras de “más de 15 artistas plásticos latinoamericanos”, seleccionados en una co-curaduría entre SGR Consultoría de Arte en Bogotá y de la Galería de Arte Contemporáneo Lokkus, en Medellín. El interesante trabajo resultante se verá desde el 28 al 31 de mayo, en la galería mencionada; una verdadera muestra de diversidad, donde no solo las técnicas de talentos conocidos y otros por descrubrir, varían entre sí, también en sus temáticas, en historias paralelas que se aproximan y hablan de una nueva generación de artistas.

En Fashion Radicals, reseñamos 3 de los 17 artistas que harán parte de Paralelo, una feria conjunta pensada en la promoción de la cultura.

 

El arte y la moda ha sido parte fundamental en su obra. Una obra que creció y se alimentó entre Medellín y Europa; desde un deseo inicial de pintar en una ciudad natal, la cual, dentro de la academia, iba olvidando la pintura y le daba prioridad a las tendencias mundiales de la fotografía, el video y la instalación durante la década de los noventas, a descubrir un lenguaje propio a partir de experiencias entre Inglaterra, España e Italia. El trabajo de Aníbal Vallejo lleva a otro nivel el concepto plástico de la figuración, la artesanía y la mezcla de técnicas, que le da un rol diferente al textil, que deja de ser lienzo para transformarse dentro de la obra. Sus figuras humanas sin rostro, la sátira y la cultura pop hacen parte de un nutrido catálogo que en la actualidad se depura y se centra en la relación de la geometría con las texturas, en acrílicos, lonas y bordados manuales.

“aparecerdesaparecer” se llama la serie que Julián Urrego presenta en el Circuito de Artes Plásticas de Paralelo. Él, creador de Taller 7, un grupo de amigos y artistas plásticos que desde 2003, se dedican a la promoción y la reflexión de prácticas artísticas alternativas, es también el dueño de una obra donde el papel recortado y superpuesto, el collage, las técnicas mixtas crean un universo pueril, en una delgada línea donde lo naive se encuentra con su lado más oscuro, sin dejar casi nunca una paleta nostálgica de colores pasteles, enriquecida en el uso de tinta, lápices de grafito y de color sobre los más variados tipos de papeles.

 

De vocación docente y con una profunda inclinación a la pintura al óleo, la obra de Alejandro Velandia es una alusión a través de la figuración de la condición humana. Es por eso que la cotidianidad es su principal inspiración, “aquellos sitios de encuentro donde prima ante todo el anonimato”, como el artista describe la temática de su trabajo. La realidad es su principal campo de acción, logrando retratos y escenas que captan el día a día perfectamente, con técnicas clásicas que recrean los nuevos paisajes contemporáneos, donde la montaña es reemplazada por el edificio, el pasto con el asfalto y la ciudad se pinta de color local.