P
año, mimbre sintético, tartán, organza, velvetín, entre otros, son parte de los insumos con los que 15 Jóvenes Creadores Colegiatura y una egresada realizaron sus propuestas para el desfile académico de Colombiamoda 2017.Este proyecto académico se materializa en un espacio intervenido de más 800 metros cuadrados, donde los equipos de diseñadores, puesta en escena y comunicación realizan desde las 16 colecciones, la imagen gráfica de cada una de las piezas del desfile, la fotografía, los contenidos y las estrategias de comunicación, hasta la escenografía de la puesta en escena final, este Laboratorio Articulado ha sido por años una incubadora de jóvenes creadores que dinamizan la industria de la moda con su creatividad y experimentación.
Como siempre de las 16 propuestas hay unas más destacadas que otras y en esta ocasión el trabajo de Vanessa Gaviria, Pamela Agudelo, Mariana Zapata, Ana Isabel Taboada, Camila Tirado, Pablo López, Julian Restrepo, Sebastian Spiess y Manuela Peña llamaron nuestra atención.
El trabajo de Pablo López es una gran ejercicio de experimentación en sastrería a escala gigante que crea la idea de nuevos volúmenes y dimensiones corporales. La moral y la ética del caos es una propuesta que mira el desorden y la agitación actual y reflexiona sobre la idea de bondad y maldad, de lo correcto e incorrecto y lo representa en piezas fragmentadas que tienen un orden desconcertante.
Julian Restrepo trabajó el tartán y se inspira en un mundo perfecto donde el imaginario de un niño rey se deforma y crea fractales de diferentes tartanes en siluetas con volumen y asimetrías. “El niño rey con un ego gigante y una obsesión por sí mismo tiene una imagen deformada que se repite hasta el infinito. Una imagen nostálgica que se difunde en el agua”.
Camila Tirado trabajó el velvetín y el powernet rosa con recogidos que crearon volumen y textura de manera alternativa, inspirada en el caos que altera el curso natural de las cosas la propuesta quiere representar los sentimientos oprimidos que comienzan a destruir el interior, “al final la idea es centrar las energías para algo positivo y poder llegar al ser que se anhela ser”.
Ana Isabel Taboada trabajó el denim y la lana virgen para representar un red de energía que permite la transformación, la trasmutación y poder trascender la vida, la muerte, el tiempo y la materia. Con drapeados la estudiante logra crear dimensiones nuevas en el cuerpo, curvas inexistente y generar la sensación de querer tocar la lana y hundirse en una dimensión abstracta.
Vanessa Gaviria creo una colección con correas de amarre y rastrap. El volumen 3D de cada pieza representa el inconformismo corporal de la mayoría de las mujeres que se convierte en una tensión interna que va deformando la realidad.
Mariana Zapata, con una colección en PVC, mimbre sintético y tela sintética esta estudiante quiere reflexionar sobre una mujer en movimiento que busca desaparecer aquello que le afecta, que se siente atrapada y consumida, pues no deja que reluzca su identidad.
Nuevamente la experimentación es la base de este Laboratorio Articulado y bajo esa premisa es importante seguir cultivando la innovación y el ejercicio creativo de conceptualizar y abstraer. En general todas las propuestas fueron valiosas y con buena factura. Mi crítica es para los textos de conceptos que deberían tener más información concreta y menos poesía de la idea de inspiración, para así poder comunicar asertivamente las intenciones de este proceso creativo de aprendizaje, ensayo y error.
Destacado el trabajo de accesorios de Sebastian Spiess que le apuesta al movimiento, la lúdica y la robótica para hablar de las emociones y de la unión entre el ser humano y la industria.
¿Qué piensas acerca de esto?
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.