BETTINA SPITZ oda a la naturaleza en BFW

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as colecciones de Bettina Spitz se caracterizan por una oda a la naturaleza y un llamado a la concientización sobre el uso y conservación de los recursos, y en esta ocasión, no fue la excepción.

Para la colección de la temporada de Otoño Invierno 2017, la diseñadora se inspiró en la fauna y flora presente en Bogotá y sus alrededores, un escenario caótico e inundado de cemento, que a primera vista, suena contradictorio, pero como dato, el bosque de la sabana presenta una altura y clima privilegiados propicios para el nacimiento del agua en el páramo del Sumapaz y que además, permite el desarrollo de numerosas especies de vegetación y vida salvaje.

 

 

Bettina Spitz traslado estos árboles a la colección, creando siluetas que asemejan su estructura, pantalones amplios con botas acampanadas que simbolizan las raíces, mangas de camisas voluminosas que salían de suéteres en tejido de punto como ramas y abrigos de lana con texturas pesadas que desde lejos fingían ser cortezas.

También los accesorios jugaron un papel interesante en las prendas, ya que si el “árbol” era una representación imaginaria de las prendas puestas en conjunto, los complementos de gran tamaño, como collares y aretes, brindaron tridimensionalidad y acentos de color y brillo al atuendo.

 

 

La moda es un excelente instrumento para la difusión de mensajes con contenido social y como lo reseñé en un artículo anterior, la camiseta tiene un poder superior a cualquier prenda ya que el mensaje se interpreta inmediatamente porque está dentro del campo visual de los espectadores, es por esta razón que Bettina Spitz lanzó una con el slogan “ser árboles”, una invitación a cuidar el medio ambiente y nuestro entorno.