AQUABELLA

Sus vestidos de baño tienen la virtud de transportar a los cuerpos que los luzcan a parajes de aguas dulces y saladas; también la de hacer de las siluetas, una mezcla de un delicado exotismo con una sensualidad sugerida en partes del cuerpo que como un mapa va creando el mundo de Piú Amore. un vasto territorio que empezó a tener forma, como un proyecto personal de sus dos creadoras, Maria Alejandra Jaramillo y Manuela de Villa, que cumpliendo la regla de los opuestos que se atraen, empezaron a contar juntas una historia en la que la búsqueda de la belleza femenina poco se ciñe a cánones establecidos.

POR ESTEBAN ARENAS

Fotografía Silva/Moreno www.silva-moreno.com

Maquillaje Alejandro Molina

Estilismo María Alejandra Jaramillo

Modelo Claudia Rocha de AeModels www.aemodels.com

Mientras Manuela toma las riendas comerciales de la marca, Maria Alejandra se dedica a soñar por medio de sus diseños, en un presente del que confiesa jamás imagino cercano al mundo de la moda. Este punto de vista ha sido definitivo para hablar de la esencia de Piú Amore, que además de ser el resultado de la coalición de personalidades de sus creadoras, es también un ejercicio que invita a las mujeres que usen uno de sus vestidos de baño, a apreciar su belleza natural, con cortes y estructuras que le rinden homenaje a la silueta femenina, logrando un equilibrio entre lo sensual y lo práctico.

Piú Amore también es color en su estado más puro, con estampados de ilusiones ópticas y románticos mosaicos florales que en detalles cubren y descubren el cuerpo, en una naturaleza latina que es y será siempre un estado inherente de la marca, así como lo es el deseo de hacer de cada mujer una diosa, una belleza bautizada por el mar, lista para disfrutar de días de sol eternos.