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on una magistral retrospectiva el desfile de Amelia Toro dio inicio al Bogotá Fashion Week 2016. Anoche uno de los patrimonios históricos de Colombia el Museo Nacional, con sus 193 años de vida, fue testigo de un gran evento de moda de la misma manera que en las principales capitales del mundo donde emblemáticas edificaciones se convierten en escenarios perfectos para cada temporada.FOTOS CAMARA LUCIDA
Teniendo como marco este auténtico monumento nacional la colección de Amelia Toro, inspirada por supuesto en Bogotá, presentó un recorrido por la historia creativa de la diseñadora, en el que se apreciaron algunas de sus piezas más icónicas: abrigos, vestidos y trajes en mezclas de texturas, con combinación de satines, lanas, chifones de seda y lúrex, en los que la delicadeza y el romanticismo se hicieron presente en una paleta otoñal de negros, grises, verdes y rojos cerezas oscuros.
Una retrospectiva fiel a los códigos de la genética Amelia Toro, en la que molas, estampados florales y holanes cobraron vigencia, esta vez con un toque contemporáneo, que en definitiva reafirmó la maestría de su técnica, su conocimiento de la proporción y la impronta de su trabajo atemporal.
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