T
anto en la vida, como en los negocios, encontrar un socio estratégico en la mayoría de las ocasiones suele ser una excelente inversión. En esta ocasión vale la pena valorar el alcance y las proyecciones que tiene para la industria de la moda en Bogotá y en Colombia, la alianza entre el Bogotá Fashion Week (BFW) y la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB) tiene mucho para reflexionar y estaremos pendientes frente al discurso oficial y el real.Contar con el aval a nivel institucional gracias a la CCB para una iniciativa que se rescato del olvido con el ánimo de recuperar un espacio legitimo en el circuito de la moda en Colombia; el BFW es un hito valioso y a su vez necesario. La moda es un negocio, cuyas cifras y volumen no sólo son representativas para generar riqueza, si no que también permiten que un sinnúmero de actores, que hacen de este sector uno de los más dinámicos de la economía, empiecen a generar un movimiento que repercute en muchos más ámbitos a nivel local.
Dicho esto esta alianza responde a un clamor imperativo de antaño, para realmente consolidar proyectos de moda productivos y competitivos, no sólo para asegurar el capital patrimonial si no humano y así poder conducir a la industria de moda en Colombia en un proceso de maduración sostenido a largo plazo; gracias a la coordinación de esfuerzos en conjunto para fortalecer cada uno de los actores que son protagonistas en la moda nacional.
Con el acto de inauguración de esta nueva etapa en la que se busca fortalecer de una vez por todas la moda en Bogotá, se compartió esta nueva ambición común en el que la moda llega al organigrama de la CCB donde los cluster de joyería, calzado y marroquinería encuentran un excelente aliado con BFW no sólo como plataforma de exhibición si no que parece que realmente se va a favorecer lo que es lógico; un plan estratégico en conjunto para eliminar duplicidades y trabajar todos con una meta común, para que todo el sistema salga reforzado.
Uno de los platos fuerte del evento estuvo a cargo de los ponentes internacionales (Edgar Carrascal, Ricardo Domingo, Walter Rodrigues y Fiona Ferrer) los cuales también compartieron escenario con Ricardo Pava, Lia Samantha y Pilar Castaño. El apartado de espectáculo contó con las pasarelas de Laura Aparicio y Laura Acevedo de Papel de Punto.
En materia de contenido uno de los mensajes que mayor eco cobró entre los diálogos que hubo durante la jornada, es que hay que apostar en reforzar y adquirir competencias no sólo de diseño, si no que los verdaderos negocios de moda, exigen una construcción e inversión inequívoca en la creación de marcas significativas. ¿Pero qué ingredientes se han de mezclar para construir una marca? Este aspecto es quizás uno de los que se espera que este refuerzo que le da la CCB al BFW permita romper el paradigma que se encuentra arraigado al sistema de moda en Colombia, de competir sólo con la variante del producto y el precio, y ¿Dónde queda la creación del valor? El valor sólo podrá ser compartido y creado, si se hace un trabajo juicioso desde el inicio en gestión y creación de marca.
Así mismo hubo otro mensaje reiterativo, respecto a los atributos con los que cuenta Colombia producto de su diversidad, que ya han generado interés en el exterior, pero que se pueden capitalizar aún más pues el Made in Colombia todavía no se mira ni se explota con el suficiente ímpetu, cómo bien podría canalizarse y hacer mucho más rentable este apartado.
Aquí la palabra clave fue: identidad. El tema de la identidad no ha de generar reservas, es decir se pueden construir relatos contemporáneos de la misma, sin caer en terrenos comunes donde muchas veces ese ha sido el freno que han tenido muchos creativos, en el momento de valorar ese ejercicio introspectivo y a partir de ahí generar una propuesta estética.
Finalmente la estructuración y preparación del BFW para su edición en 2017, recabara el talento para dicha pasarela, con una convocatoria que se abrirá el día 19 de Agosto hasta el 30 de Septiembre del año en curso, donde la lista de seleccionados definitivos para el BFW será publicada el día 10 de Octubre.
En síntesis las reflexiones finales, frente al discurso pueden ser sintetizadas bajo un esquema DAFO (Desafíos, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades).
Desafíos.
- Se ha de apostar por el rigor y excelencia en el ejercicio de curaduría, con el ánimo de ofrecer un espectáculo, donde se eviten al máximo asimetrías con relación a las propuestas que llegan a confeccionar un gran evento de moda como el que aspira convertirse el BFW.
- En el momento de celebrar la próxima cita del BFW en 2017, se ha de trascender del mero evento de moda, es decir la ciudad se ha de volcar a la moda y con ello se pueden activar muchos sectores productivos conexos y así ; se puede explotar mucho mejor la pertinencia de la existencia de este espacio de encuentro.
Amenazas.
- El talón de Aquiles en este tipo de proyectos y sobre todo en la industria de la moda, se encuentra vinculado a la gestión de egos, hay que entender que se requiere más humildad, escuchar al otro y sobre todo solidaridad; para construir proyectos con vocación en el tiempo.
- Que el apoyo institucional de la CCB se resista a ceder para que los responsables de la dirección del BFW y su equipo, consoliden un proyecto de moda capaz de convertirse en una institución en la ciudad como ya lo es ARTBO, y con ello el BFW también se constituya en uno de los patrimonios contemporáneos de Bogotá a mediano y largo plazo.
- La falta de paciencia de los principales interesados en que este proyecto adquiera entidad. Esta es una apuesta que también tiene que madurar con el tiempo, y con ello evitar que vuelva a caer el el olvido por ser atacado entre pares de la industria.
- Creer que la subvención o ayudas que puedan aparecer en el camino, sean la respuesta para que su negocio de moda, sea sostenible, error se requieren de muchos más activos para que realmente este tipo de apuestas funcionen.
Fortalezas.
- No sólo la CCB aparece en el renglón de apoyo institucional, la alcaldía de Bogotá con la Secretaria de Desarrollo Económico, Procolombia, Marca País, Brand Colombia son instituciones con las que también se puede reforzar y se van a coordinar acciones y estrategias conjuntas; para favorecer el sistema creativo de moda en Bogotá.
- Se supera el carácter de mero espectáculo y desaparece el renglón de ir mendigando en el tema financiero, para sacar adelante una puesta en escena de tres o cuatros días. Ahora se puede transformar y planear con esa incertidumbre menos, con algo más de sosiego y perspectiva.
- Contar con la estructura de la CCB para conocer mejor a los empresarios del sector moda, va a permitir documentar con mayor facilidad el clamor general de los profesionales en el ámbito creativo.
Oportunidades.
- Abandonar prácticas nocivas que han entorpecido la posibilidad de trabajar en equipo, para que todos los actores relacionados en el ámbito de la moda, se sientan parte de esta apuesta común.
- Superar esa poco necesaria e incomoda “rivalidad“ entre dos puntos claves para el sistema de moda en Colombia (Bogotá – Medellín ) el talento en Colombia es universal y para madurar como industria hay que reconocer el esfuerzo y visión en cada punto estratégico; y trabajar el consecuencia.
- Invitar a Bogotá a creérsela y a trabajar en consecuencia para fortalecer y favorecer la cultura de moda desde lo urbano y local, para diseñar y dejar los planes a corto plazo atrás en este segmento de mercado.
Parece que ya el rumbo está claro con esta alianza estratégica entre el BFW y la CCB así que por si los vientos llegaren a ser adversos en el camino, por lo menos el destino se divisa de forma más nítida al menos de cara al público, así que ahora a trabajar, ejecutar, escuchar de forma activa y favorecer al BFW como un nuevo patrimonio para Bogotá.
Edgard Pérez
agosto 19, 2016Muchos éxitos en este proyecto !!! La unión hace la fuerza …. Creer y proyectar el talento nacional …. Felicitaciones