Foto de MNG 2014
“La moda camina hacia una frivolidad tan estulta como la de Versalles antes de la revolución francesa”, esta frase dicha por la periodista Gabriela Bustelo de Uruguay en el artículo Una Epidemia llamada moda en la revista Arcadia es precisamente la que hace que el Normcore esté de moda y coincidimos con Bustelo cuando dice que actualmente hay un fenómeno que venera la moda hasta la nauseas, de hecho vemos que hay un ejercito de mujeres y hombres adinerados que se dedican al estilismo, la asesoría de imagen y a ser iconos en redes sociales como máxima de éxito profesional y se toman fotos o son asediados por cientos de fotoblogs en las afueras de los recintos de los desfiles, que ya son una epidemia y lo único que hacen es homogenizarlo todo, lo cierto es que la idea de lo cool ha perdido su fundamento de ser distinto y alternativo, pero aunque este llamado Normcore pretende ser una contracorriente para que la moda de paso a otras cosas y deje de enfocarse en llevar el vestido estampado de la pasarela, ya entró en el sistema de tendencias y moda.
Y aunque lo anterior es una generalización, según los expertos en moda y tendencias al parecer ya no es ninguna novedad ver a los blogueros o celebridades del momento llevando los atuendos de las pasarelas de pies a cabeza y vestirse normal es “lo nuevo”. Acorde con Vogue.es el término normcore procede del colectivo K-Hole que lo describe como la apología al effortless (sin esfuerzo), pero llevado a un nivel superior. Así, frente a un tacón de aguja, unos tenis o unas sandalias de goma que contradictoriamente están de moda pero son una anti-tendencia. “La intención reside en prescindir de lo trendy, rescatar prendas totalmente casuales a riesgo de resultar vulgares o ordinarias, pero que en definitiva pudieran pasar desapercibidas en cualquier avenida de una capital global.” dice Mario Ximénez en Vogue. es
En conclusión, vestir normal está de moda, atrás quedaron aquellos atuendos de última tendencia, llenos de estampados y colores exuberantes o el look total de la pasarela, ahora se trata de vestir básicos y clásicos como la camisa blanca, los pantalones negros, el traje de masculino de sastre, los tenis o zapatos bajos, los colores neutros como el beige y el gris y los atuendos monocromáticos o de un solo tono. En definitiva el Normcore este otoño 2014 es la apuesta, así que lleva la Anti-tendencia.
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