¿Qué tienen en común una silla de policarbonato con el sonido de Kravitz? Pues un estilo de vida, un objeto de deseo, una identidad. Día a día vemos cómo empresas de diseño se une con celebridades, artistas y diseñadores para crear más allá del simple objeto un deseo.
En esta ocasión la reconocida silla Mademoiselle creada por Philippe Starck se reintrepreta de la mano del músico Lenny Kravitz. El proyecto surgió de la amistad que años atrás han tenido estos dos artistas. El resultado de esta combinación es una exclusiva colección de seis sillas mademoiselle tapizadas con una combinación de telas de diferentes texturas, seleccionadas junto con Starck, así como textiles exóticos y materiales tejidos que se unen para crear una experiencia visual y táctil con los diseños que reflejan el carácter y el espíritu de ambos artistas. “Philippe Starck ha sido un apoyo maravilloso de mi diseño, así que cuando él me preguntó si yo interpretaría su silla mademoiselle para Kartell, estaba entusiasmado con la idea y en el resultado final del trabajo”, expresó Kravitz.
“El diseño de Kravitz nace de la materialidad, madera, piedra, metal; pero también le dio un sello inmaterial, como luz, temperatura, recuerdos, sonidos y música. Lenny ha demostrado el más alto nivel que podría crear un universo musical entero. Ahora es el momento para él traducir la magia de su música en la materialidad, en sillas. Una nueva experiencia para Lenny, un nuevo territorio para nosotros”. Expresó Philippe Starck.
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